el eremita

Paz, Amor y Luz. Al servicio de DIOS. Somos UNO.
24-2-2011
EL Eremita.

Hace tiempo, en un lugar de la tierra vivió un eremita, era un hombre de una profunda paz, no tenía nada para vivir y cada día dependía de la caridad de sus vecinos.
En esos mismos días, había un hombre malvado que se propuso hacer la vida imposible al humilde eremita, este hombre trató por todos los medios de hacerle daño.
Cuando los vecinos acudían en romería y llevaban víveres al eremita, el hombre malvado, por la noche le quitaba las escasas donaciones, incluso alguna vez quemó el jergón y las pocas pertenencias que el eremita tenía. En esos momentos, en los que el eremita pareciera que iba a perder la calma y abandonar su modo de vida, el eremita simplemente recitaba esta oración:

Padre en ti confío,
siempre he confiado
y voy a seguir confiando.
Es por el amor que os tengo,
que he decidido vivir en vuestro regazo
y sé que estoy en los mejores brazos,
por lo tanto no tengo miedo
y sin vacilar una vez más,
hago el voto de entrega total,
en tus brazos Padre.

Acabada esta oración, el eremita encontraba siempre lo que necesitaba y de nuevo todo recobraba la paz.